Por qué nos preocupamos por la COP26 y por qué tú también deberías

Si has visto el informe climático, recién publicado, del Panel Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC), ya sabes que nuestro planeta está en peligro. Y si no lo has hecho, aquí está la versión corta: los seres humanos y los países más ricos, es decir, los mayores emisores del mundo, son responsables de la contaminación que está cambiando el sistema climático tan rápidamente. ¡Y la Tierra no puede seguir el ritmo! El cambio climático es real y está matando gente y destruyendo nuestro entorno.

Si queremos seguir viviendo y disfrutando de esta tierra, ¡tenemos que ponernos las pilas, y tenemos que hacerlo ahora! Pero no podemos hacerlo solos. Necesitamos que nuestros líderes políticos participen plenamente para realizar cambios reales. ¿Entonces cómo lo hacemos? No es fácil. Pero es factible y, en parte, depende de una importante reunión de líderes mundiales llamada COP26.

¿Por qué es importante la COP26?

Es fácil perderse en todas las siglas (IPCC! GHG! CO2!), pero COP26 es la abreviatura de "Conferencia de las Partes" y se refiere a las 197 naciones y territorios que son signatarios de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático. Las Naciones Unidas convoca una reunión anual de las partes de la CMNUCC, llamada COP, para organizar una respuesta global a la crisis climática. Y en este momento, todos los ojos están puestos en la COP26, que se celebrará en Glasgow del 31 de octubre al 12 de noviembre de 2021. Esto es un gran problema, ya que la COP26 se trata de tomar medidas, no de hablar o simplemente hacer planes, para alcanzar los objetivos del Acuerdo de París y la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático. ¡Es nuestra mejor oportunidad para evitar los impactos catastróficos del calentamiento!

¿Qué es el Acuerdo de París?

El Acuerdo de París es un tratado internacional que creó un marco a través del cual los países emprenden acciones colectivas para combatir el cambio climático. Se estableció en 2015, cuando 197 países se comprometieron a trabajar juntos para luchar contra el cambio climático. Es importante porque estableció un objetivo claro para limitar el aumento de la temperatura global. Para que esto suceda, todos los países deben trabajar como un equipo global para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero a lo grande.

Y sabemos que ya has escuchado todo esto antes. Pero vale la pena señalar que esto es factible, ¡pero solo si TODOS los países involucrados hacen su parte!

Hay mucho en juego para todos nosotros. Pero incluso más para las personas que viven en la pobreza, las mujeres, los niños y los pueblos indígenas, porque el cambio climático afecta de manera desproporcionada a quienes menos pueden permitírselo, a pesar de que es causado en gran parte por los estilos de vida occidentales en los países más ricos. Es por eso, que el Acuerdo de París aborda específicamente este tema de la "justicia climática", porque las personas que son menos responsables de causar el cambio climático son las que sufrirán más.

¿Por qué es importante la Justicia Climática?

La justicia climática se reduce a este hecho: si tienes dinero y recursos, podrás adaptarte mejor a los patrones climáticos cambiantes, las temperaturas extremas, las sequías, las inundaciones y los nuevos patrones de migración causados ​​por el cambio climático. Las personas con menos recursos no pueden. Hay un costo social del cambio climático que las personas que no pueden pagarlo, lo pagan desmesuradamente y, con demasiada frecuencia. Lo pagan con sus medios de subsistencia y hasta con sus vidas.

Las personas que se ven afectadas por incendios forestales, inundaciones, sequías y contaminación no son, en general, las responsables de causar el cambio climático. Pero son ellos los que están siendo castigados. Muchos no pueden permitirse el lujo de mudarse o no tienen adónde ir. Eso significa que incluso si tienen la suerte de escapar con vida, estos refugiados climáticos pueden perder sus medios de vida y sus hogares.

La justicia climática se trata de justicia para todas las personas. Para hacer una transición justa hacia una economía de energía limpia, los países más ricos y los mayores contaminadores deben intensificar la ambición de sus compromisos y establecer metas específicas y viables para reducir rápidamente sus emisiones y ayudar. Y por otro lado, deben financiar la transición hacia la energía limpia de los países con menos capacidades para hacerlo. Y ahí es donde entra la COP26.

¿En qué debemos estar atentos en la COP26?

Todos los desafíos a los que nos enfrentamos dependen de limitar el cambio climático a aproximadamente 1,5 ° Celsius. Pero para hacer eso necesitamos identificar, y lograr, algunos objetivos ambiciosos de reducción de emisiones. En la COP26 de octubre se le pide a cada país que actualice sus metas de reducción de emisiones para asegurar que sean fieles en mantener el aumento de temperatura por debajo de 1,5ºC. Estos objetivos variarán en función de los desafíos y planes de acción de ese país, pero cada uno se centrará en formas específicas para que se reduzca la contaminación, se mantengan los combustibles fósiles en el suelo, se invierta en energías renovables, se detenga la deforestación y se avance hacia vehículos eléctricos.

El cambio climático no es algo abstracto. ¡Ya esta aquí! Para sobrevivir, tendremos que adaptarnos y tendremos que ayudar a los países con menos recursos a ser más resilientes. Mitigar los efectos del cambio climático requerirá importantes inversiones tanto de dinero como de recursos humanos. Es por eso que hacemos un llamado a los líderes mundiales para que apoyen los esfuerzos de la COP26 tanto financieramente como a través de iniciativas de energía más limpia, y hacemos un llamado a los líderes mundiales para que tomen medidas, AHORA, para lograr el clima y la transición a una economía libre de combustibles fósiles. 

¡La inacción no es una opción!

Sabemos sobre el cambio climático y los riesgos que plantea desde hace años. El informe científico más reciente de la ONU simplemente confirma lo que hemos sabido desde el principio: los seres humanos son un importante contribuyente al cambio climático y sus acciones han provocado que el planeta se caliente 1,1 ° C más desde el siglo XIX. Las olas de calor, las inundaciones y los incendios forestales están matando a personas en todo el mundo, y tenemos que actuar AHORA si queremos hacer algo al respecto. Amamos esta Tierra, y estamos bastante seguros de que tu también. Por eso, te pedimos que FIRMES la Petición Global por el Clima. Podemos hacerlo, ¡pero nos necesitamos a todos y todas para lograrlo!